Defender la Belleza como una Certeza

Cuatro cuadros con tensión interna, con inquietud, en los que se respira lo que no se ve.

El arte reivindica y me emociona, lo estudio como espectador, y como artista, busco la plasticidad y la belleza, sin olvidar la carga psicológica. La intención es emocionar y reflejar vida.

● Diez chicos, 2017 Lienzo cuadrado y grande, con muchachos en varias escalas por la perspectiva, vestidos con diferentes azules que crean una estructura homogénea y rostros definidos o desdibujados. Jóvenes, como si la felicidad aún no hubiera llegado del todo, como si aún no pesaran las responsabilidades.

Yo me sitúo en la emoción que puede despertar esa imagen. No siempre hay que explicarlo todo. Y no, no es banal ni superficial. (ver en web)

● Cansado, 2022 Alargado, un chico muy alto, tumbado y fundido en una abstracción de colores grises y azules. Silueta marcada por una línea potente, y relleno blanco de la camisa componen un cuadro sin estridencias y calmado. Las palabras de Luis Eduardo Aute podrían resonar aquí, al igual que en el resto de mi obra:

Reivindico el espejismo de intentar ser uno mismo. Ese viaje hacia la nada que consiste en la certeza de encontrar en tu mirada la belleza (ver en web)

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● Adoctrinamiento, 2024 El título se debe a la inquietud que me generan las imposiciones políticas, en la prensa, en cualquier agrupación e incluso en disciplinas artísticas, como si no se pudiera convivir con la diferencia. Falta educación en el análisis o en la opinión. Colores llamativos integrados con garabatos. Aparentemente posan en un momento alegre, pero no puedo dejar de sentir inquietud al verlas. (ver en web)

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● Los lunares no son solo de Kusama, 2025 Belleza, verdad y bondad: no son ocurrencias modernas, son ideas que atraviesan la vida desde los presocráticos hasta Einstein. Tres pilares de mi manera de entender el arte, muchas veces con humor. Parte de dos figuras en las que los lunares participan para potenciar los ritmos y el juego del color sobre color. Guiño a Yayoi Kusama. Mi propio lenguaje cuida la imagen tanto como el concepto, busco la capacidad de sorprender. Cuestiono lo establecido, defensa de la estética y la libertad creativa. Siempre con figuras porque es lo que realmente me motiva, no caer en el Happy Flowers cuando se busca la Belleza. (ver en web)